Treinta mujeres, todas ellas mayores de 30, participan en el talent show chino Hermanas que surcan los vientos y rompen las olas, en el que las cinco primeras pasan a formar parte de una girl band. El programa de telerrealidadt, que se estrenó el 12 de junio en Hunan Television y en la plataforma de streaming Mango TV, ha levantado pasiones en el país, puesto que la industria del entretenimiento rara vez favorece a chicas que pasan de la veintena.
Las actrices Ning Jing, de 48 años, y Christy Chung, de 50, son algunas de las concursantes, entre las que también figura la cantante Zhang Hanyun, de 31. El programa cuenta además con un equipo de preparadores, integrado por un conocido actor, la presidenta de una discográfica, un manager de celebridades, un director musical y otro de escena. La primera emisión, en la que las aspirantes tenían que demostrar sus dotes para el canto y el baile mediante actuaciones en solitario y en grupo, cosechó más de 15 millones de espectadores en dos horas e incendió las redes.
“Puede que reunir a todas estas mujeres haya convertido Hermanas en el reality show más interesante del año”, afirma Yang Chang, que trabaja en una empresa de comunicación en Beijing. “Aunque vivimos en una cultura obsesionada con la juventud, el programa envía el mensaje de que el atractivo de las mujeres consolidadas y con experiencia no caduca”.
Molly Tang, una seguidora del programa que se aproxima a la treintena, encuentra a las concursantes “geniales, modernas y atractivas”. “En vez de seguir las tendencias, cada una tiene su propio estilo. Admiro su valentía para romper con los estereotipos de lo que se supone que debe aparecer en el escenario o en la pantalla”, señala esta joven, que asegura que después de ver el reality ya no tiene miedo a envejecer.
El regreso de rostros conocidos
Además de las actuaciones, los testimonios francos y directos de las aspirantes sobre su edad, su carrera o sus experiencias vitales también han causado revuelo en Internet. “Tengo 39 años y estoy en el mejor momento de mi vida”, asegura la cantante Yumiko Cheng, que vive en Hong Kong y participa en el programa. “Ahora me conozco mejor a mí misma y soy mucho más sabia”.
Tras empezar su carrera como cantante hace 18 años y publicar varios discos en cantonés y mandarín, en 2012 una rama le atravesó el pulmón por culpa de un accidente. Ralentizó su carrera, se casó en 2014 y dio a luz una niña al año siguiente. “Puede que exista una gran cantidad de jóvenes que nunca ha oído hablar de mí, pero he trabajado en la industria mucho tiempo y me siento segura sobre el escenario”, afirma. “Se sorprenderán”.
La experiencia es un grado
La actriz Bai Bing, de 34, se hizo famosa por sus papeles en El mito, una serie dramática de 50 capítulos que se emitió en 2009, y en Begonia de invierno, cuyas 49 entregas pudieron verse este año. También ella se sinceró en el reality. “Muchas personas piensan que soy una mujer casada que no necesita trabajar y que lleva una vida de lujo, pero lo cierto es que me divorcié hace varios años y ahora soy madre soltera”, confiesa. “Gracias a mi familia, que me ayuda a cuidar a mi hija, he podido continuar mi carrera como actriz”.
El programa también cuenta con la presencia de la cantante Aduo, que pertenece al grupo étnico tujia. Aunque en 2001 fichó por la banda Chia Tai y sacó dos discos, saltó a la fama en 2005 tras aparecer en la Gala anual de la Fiesta de Primavera de la Televisión Central de China (CCTV), donde cantó durante la presentación de baile Goodbye, Carmen. Entonces, su popularidad le brindó muchas oportunidades para actuar.
Como muchas otras chicas jóvenes, cuando Aduo tenía 20 años disfrutaba de la música y le encantaba aparecer en concursos de la tele para promocionarse. No obstante, en 2011 perdió el interés por la escena musical y cambió de rumbo profesional.
“En 2012 dejé de escuchar y tocar canciones pop”, cuenta la intérprete, que desde ese año hasta 2016 se dedicó a recorrer aldeas remotas de las provincias de Hunan, Yunnan y Guizhou, donde viven los miao y los tujia. “Durante los últimos ocho años, me he centrado en mi propio proyecto de música étnica, por lo que para mí uno de los mayores desafíos a la hora de aparecer en el programa fue volver al pop”, explica Aduo, que en un principio rechazó la oferta de participar en el show.
Hacia una nueva mentalidad
“Los miembros del jurado son más jóvenes que yo. Los fans de menos edad no saben quién soy ni están familiarizados con mi estilo, pero tampoco pretendo dirigirme a ningún público en particular”, comenta. “Simplemente dejo que mi actuación hable por mí”, dice la cantante, que se confiesa impresionada por el resto de concursantes. Además de atractivas, las considera muy seguras de sí mismas.
“La opinión pública respecto a las mujeres ha cambiado. En vez de valorarlas por su edad, la gente está dispuesta a aceptar que existen varios modelos femeninos”, señala. “Tan solo nos mostramos a nuestra manera, tal como somos”.
Para el veterano productor musical Zhao Zhao, las experimentadas intérpretes no temen explorar nuevas vías sobre el escenario. “Son versátiles y creativas”, afirma el también compositor y director, que fue miembro del equipo encargado de la música de la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Beijing de 2008. “De este reality saldrá un grupo femenino diferente a los demás”, asegura. “Cada una tiene un estilo único”.