Un cambio silencioso y radical atraviesa el corazón de la industria china. El sector nacional de la maquinaria de construcción, que en el pasado era sinónimo de producción en masa y mano de obra barata, lidera ahora la fabricación inteligente en todo el mundo. En un momento de tensiones geopolíticas y rivalidad tecnológica, se trata de un giro que está redefiniendo las cadenas internacionales de suministro.
La imponente grúa XCA 4000, fruto del trabajo de cien investigadores durante dos años, ejemplifica esta pujanza. Diseñada para levantar palas eólicas, permite trabajar a 162 metros de altura, incorpora inteligencia artificial y es la máquina sobre ruedas que más peso puede elevar del mundo.
Un nuevo rol
Durante décadas, China apostó por producir a gran escala para dominar el sector de las manufacturas. Hoy, gracias a la inteligencia artificial, las redes 5G y el apoyo político que recibe para avanzar por esta vía, la nación reconfigura su papel en el panorama internacional. La industria china de máquinas y equipos inteligentes facturó el año pasado 3,2 billones de yuanes (más de 390.100 millones de euros), según el Ministerio de Industria y Tecnología Informática. El sector cuenta con 421 fábricas piloto que se dedican a hacer pruebas a escala nacional, así como decenas de miles de talleres digitales y fábricas inteligentes de rango provincial.
Según Huang Qifan, asesor académico del laboratorio de ideas Finance 40 Forum, la capacidad de producción de la nación no tiene parangón. Naciones Unidas clasifica la cadena industrial en 41 categorías principales, 207 secundarias y 666 menores, y China es el único país que puede asumirlas todas, asegura.