El comercio electrónico en vivo, una práctica que consiste en anunciar productos mediante transmisiones en directo en internet, favorece el consumo y el empleo en China, según revela un informe del instituto de investigación del Centro Internacional de Comercio Electrónico de China.
Una única sala virtual de emisiones en directo puede requerir más de 30 perfiles profesionales, como presentadores, analistas de vídeo, editores o asesores de gastos. Este espacio online también genera nuevos puestos de trabajo, como seleccionadores de productos, guionistas, productores de contenido o gestores de tráfico de datos.
Gracias a la inteligencia artificial y los macrodatos de los que se sirven, las transmisiones en directo ofrecen una experiencia de compra en tiempo real, interactiva e inmersiva, por lo que cada vez más marcas recurren a ellas para conectar mejor con su público.
Un sector en auge
Según un estudio de la plataforma de vídeo Kuaishou, las empresas que emiten en directo de forma habitual han captado a más del 70% de sus nuevos clientes gracias a esta práctica. Además, las sesiones de livestreaming mueven a las empresas a mejorar y lanzar productos inéditos al mercado con más rapidez.
De acuerdo con estimaciones de la consultora iResearch, el sector del comercio electrónico en vivo generó el año pasado en China 5,8 billones de yuanes (710.500 millones de euros), lo que supone una tasa de crecimiento anual compuesta del 18% entre 2024 y 2026.