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El esturión ‘extinto’ del Yangtsé vuelve a su estado salvaje
Miembros de una patrulla del río Yangtsé contemplan un esturión en cautividad.

El esturión ‘extinto’ del Yangtsé vuelve a su estado salvaje

Un equipo de investigadores consigue que la especie, considerada extinta en la naturaleza, procree de nuevo en el río
HUANG ZHILING - 28 Abr 2023 8:00

El esturión del Yangtsé, que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) consideraba extinto en el medio salvaje, ha vuelto a reproducirse en libertad en la provincia de Sichuan. Eso sí, gracias a un pequeño empujón humano. Según los investigadores, se trata de un paso clave para poder repoblar el mayor río de China con ejemplares de este pez. 

En la Lista Roja de Especies Amenazadas que publicó en julio de 2022, la UICN declaró que esta icónica y rara variedad de esturión había desaparecido de la naturaleza. Sin embargo, el pasado marzo los investigadores soltaron 20 ejemplares adultos, machos y hembras, en el tramo de Jiang’an, situado en Yibin. La operación consistió en depositarlos en el río dentro de unas jaulas experimentales de 45 metros cúbicos. Dos días después, cámaras submarinas certificaron que los peces habían desovado de manera natural y solo hubo que esperar unas jornadas más para ver cómo eclosionaban los huevos.

Primera evidencia científica en 20 años

Casi ocho meses después de que la especie fuera dada por extinta en entornos naturales, el esturión volvió a procrear en un contexto salvaje. Para Du Hao, científico del Instituto de Investigación Pesquera del Río Yangtsé de la Academia de Ciencias Pesqueras de China, esto demuestra que el animal aún conserva su instinto de reproducción en la naturaleza. Según afirma, el avance sienta las bases para recuperar la población de esturiones del Yangtsé y reestablecer su hábitat.

En los últimos años se han soltado muchos ejemplares en el río para que crecieran en libertad, pero hasta la fecha no se había conseguido hacer un seguimiento de la suerte que habían corrido. Gracias a las jaulas monitorizadas, es la primera vez en veinte años que los investigadores pueden demostrar que los animales han desovado en la naturaleza.