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Nuevos horizontes para las aves de paso
Una bandada de aves migratorias alza el vuelo en unos humedales protegidos de la Región Autónoma de Mongolia Interior.

Nuevos horizontes para las aves de paso

China refuerza la protección de sus humedales con el fin de preservar el hábitat de las especies migratorias. Las poblaciones de grullas, patos o cisnes vuelven a crecer
LI HONGYANG - 13 Abr 2023 14:19

Ante la amenaza que supone el cambio climático para el hábitat de la grulla siberiana, los expertos aseguran que cada vez es más importante proteger a estas aves y garantizar sus rutas migratorias.

La variedad oriental de esta especie se reproduce en la región rusa de Siberia y luego se desplaza en invierno al lago Poyang, situado en la provincia china de Jiangxi, al este del país. Allí pasa la temporada cerca del 95% de estos animales.

El profesor Qian Fawen, investigador del Centro Nacional de Anillamiento de Aves de China, que forma parte de la Academia de Silvicultura de China, subraya que el nivel del agua es lo que determina si un terreno es o no apto para anidar. Sin embargo, el calentamiento global está provocando que fluctúe de forma anormal. “Algunos años hay inundaciones y otros, sequías. Ambas circunstancias generan escasez de alimentos para las grullas”, explica.

Las grullas siberianas se alimentan de plantas como los pastos acuáticos. Durante los períodos en los que el agua disminuye o se desborda, este tipo de hierba no crece bien, por lo que las aves tienen que ir a buscar su alimento a tierras de cultivo.

Con el fin de proporcionarles comida durante el invierno y contribuir a resolver el problema, el Gobierno provincial de Jiangxi ha plantado 70 hectáreas de raíces de loto en la ciudad de Nanchang.

Pese a que la grulla siberiana figura en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza como una especie en peligro crítico, Qian asegura que el número de ejemplares ha pasado de 3.000 a 5.000 en los últimos 20 años. Este experto lleva observando aves en el lago desde 1999 y asegura que “si queremos protegerlas, tenemos que cuidar su hábitat, que está compuesto esencialmente por humedales”.

El Plan de Acción Nacional para la Protección de las Rutas Migratorias de las Aves (2021-2035), publicado hace poco, identificó que en China hay 1140 zonas clave para garantizar la reproducción, la invernada o las paradas migratorias. Poyang y los humedales del río Amarillo, en la Región Autónoma Hui de Ningxia, figuran entre ellas.

Según la Administración Nacional de Silvicultura y Praderas, el país alberga 804 especies de aves migratorias, lo que supone el 55,6% del total de las aves. Desde que China se unió a la Convención de Ramsar, un tratado intergubernamental para la protección de humedales firmado en Irán en 1992, ya ha catalogado casi 7,65 millones de hectáreas de su territorio como Humedales de Importancia Internacional.

A menudo llamados “riñones de la Tierra” o “reservas genéticas de especies”, los humedales se encargan de conservar y limpiar el agua, mantener la biodiversidad, contener las inundaciones y prevenir las sequías.

De acuerdo con el plan elaborado por el Gobierno central del país el pasado octubre, China tendrá ya protegido el 55% de sus superficies acuosas para 2025. Desde que el 1 de junio de 2022 se aprobó la Ley de Protección de Humedales, la primera del país que se ocupa de salvaguardarlos, el cuidado de estos terrenos se ha intensificado de forma integral.

La ley establece un reparto en la gestión de estos ecosistemas y contempla sanciones severas para las personas que les causen daños. También limita las edificaciones en humedales nacionales importantes y prohíbe realizar actividades que puedan resultar perjudiciales, como la creación de tierras ganadas al agua, el sobrepastoreo, las cosechas excesivas o el vertido de aguas residuales.

Los principales organismos que gestionan las reservas naturales de China afirman que cada vez más aves, entre las que se encuentran algunas nuevas especies raras, eligen sus humedales para pasar el invierno.

En febrero, la oficina forestal de la provincia de Hunan informó de que 72 especies de aves acuáticas habían permanecido durante la temporada pasada en el lago Dongting, que se extiende por varias ciudades y condados. El terreno acogió a ánades reales y grullas euroasiáticas, pero también a espátulas de cara negra, una especie rara y en peligro de extinción que no se avistaba por la zona desde hacía cinco años.

Durante una jornada especial de observación que realizaron en diciembre, los trabajadores de la Reserva Natural Nacional de Aves de Chongming Dongtan, en Shanghai, registraron la llegada de 2.900 cisnes chicos, casi el triple de los 1.000 censados durante el invierno de 2021-2022.

Según la Oficina Forestal de Shanghai, más de 3.000 cisnes solían pasar el invierno en la reserva durante la década de 1980. Más tarde, la cantidad de ejemplares se fue reduciendo hasta que solo quedaron algunas decenas. No obstante, gracias a las iniciativas de recuperación que se están llevando a cabo, la población de aves migratorias crece de nuevo.