El G-20 se enfrenta en la actualidad a una economía mundial más fragmentada que la de 2008. Puesto que se trata del foro más relevante para la colaboración internacional en asuntos económicos, el presidente chino, Xi Jinping, insta a los países que forman parte de él a seguir actuando como una fuerza que mejore la gobernanza global e impulse la historia hacia adelante.
“Han pasado 16 años desde que se celebró la primera gran cumbre del G-20. A lo largo de estos años, hemos apostado por la solidaridad para abordar la crisis financiera internacional, promovido la colaboración económica, financiera y comercial en el ámbito internacional, y reconducido la economía mundial hacia su recuperación”, afirmó Xi la semana pasada durante la XIX cumbre del grupo, celebrada en Río de Janeiro (Brasil).
Con el fin de mejorar la gobernanza del comercio internacional y construir una economía mundial que se caracterice por su apertura, Xi señaló que el desarrollo debe colocarse en el centro de la agenda económica y comercial. Asimismo, apostó por avanzar de forma sostenida para que el comercio y las inversiones se liberalicen y sean más accesibles.
El presidente chino destacó la necesidad de seguir adelante con la reforma de la Organización Mundial del Comercio (OMC), oponerse al unilateralismo y el proteccionismo, restaurar el normal funcionamiento de su mecanismo de solución de diferencias lo antes posible y llegar pronto a un consenso sobre un acuerdo de comercio electrónico. “Es importante tener bien presente que la humanidad vive en una comunidad de futuro compartido. Hemos de tomar el desarrollo de los demás como oportunidades en lugar de desafíos, y tratar a los otros como socios en vez de rivales”, añadió Xi.
Por otro lado, el presidente chino emplazó a los miembros del G-20 a aumentar el consenso internacional en el ámbito económico, financiero, comercial, digital o medioambiental, entre otros, con el fin de promover un mundo multipolar igualitario y ordenado y una globalización económica universalmente beneficiosa e inclusiva. “China está dispuesta a seguir colaborando de forma estrecha con todas las partes en infraestructuras, energía, minería y transportes verdes, y brindará su ayuda a los países en desarrollo con los medios a su alcance”, recalcó Xi. Tras recordar que gestionar la seguridad internacional forma parte de la gobernanza global, el presidente chino afirmó que el G-20 debe apoyar a Naciones Unidas y a su Consejo de Seguridad para que tengan más fuerza, así como respaldar todos los esfuerzos que se hagan para encontrar una solución pacífica a la crisis.
Evandro Menezes de Carvalho, profesor de Derecho Internacional de la Universidad Federal Fluminense de Brasil, indicó que, con su visión sistémica de la gobernanza mundial, Xi subrayó en su discurso acciones clave para cada una de sus principales áreas. “Mediante acciones concretas, China ya ha demostrado ser un país comprometido con el desarrollo de un orden internacional más inclusivo. Además, ha sido muy activa a la hora de promover una perspectiva ecológica a través de grandes inversiones en tecnología y protección del medio ambiente”, señaló.