El pasado 24 de marzo, la División de Ingeniería n.º 4 de China Railway (China Railway No 4 Engineering Group Corporation, conocida como CREC4, por sus siglas en inglés), hizo entrega de una planta urbana de suministro de agua que había construido a operarios de Costa Rica en una ceremonia a la que asistió el presidente del país, Carlos Alvarado Quesada.
La planta, el tercer proyecto que se lleva a cabo en Costa Rica con la ayuda de China, empezó a levantarse en 2019. Permite que los residentes del cantón de Cañas, situado al noroeste del país latinoamericano, puedan acceder a suficiente agua potable y solucionar así el problema de contaminación causado por el arsénico.
“Gracias al equipamiento y a la avanzada tecnología de esta obra, es posible tener agua de buena calidad que impulse el desarrollo comercial y productivo de la zona”, afirma Francisco Alberto Mendoza Mata, técnico especialista del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados, que gestiona el sistema de suministro de agua del país.
El mismo día en que tuvo lugar la ceremonia de entrega en Costa Rica, CREC4 completó también la construcción de una carretera de 76 kilómetros que atraviesa las montañas del norte de Angola. Según explicó Antonio Rosario Alex Mutunda, el vicegobernador de la provincia de Uíge, la vía une las localidades de Quitexe y Ambuila y pasa por decenas de pueblos que tienen granjas y producen leña. “No solo facilita el transporte entre las dos ciudades, sino que beneficia a muchas personas que se encuentran a lo largo del trazado. Ahora pueden comerciar con el mundo exterior”, señala. Los lugareños la llaman “la carretera de la amistad”.
Desde Etiopía a Mongolia
Todos estos proyectos se enmarcan dentro de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, un plan de desarrollo de infraestructuras a escala mundial que se presentó a finales de 2013 y que ha estimulado el trabajo que las empresas chinas llevaban años haciendo en el extranjero.
La división CREC4, que se administra de forma centralizada desde el grupo China Railway, ha ido más allá de sus negocios principales, centrados en la construcción de vías férreas y carreteras. Ahora se dedica también a edificar viviendas, obras públicas y proyectos de eficiencia hídrica. Además de haber participado en operaciones a gran escala dentro de China, esta división ha trabajado también en casi 20 países, entre ellos Angola, Etiopía, Mongolia, Indonesia y Bangladesh.
Chen Hong, empleado durante más de 15 años en proyectos de CREC4 en el extranjero, recuerda especialmente su labor en Mongolia. Afirma que se sintió muy orgulloso en enero de 2019, cuando entregaron al país un centro para niños discapacitados que habían construido y empezó a funcionar.
“Quiero expresar mi más profundo agradecimiento a CREC4 por haber levantado un hospital tan extraordinario y moderno para nosotros”, afirmó Galbadrah, la persona que designó el Ministerio de Salud de Mongolia para hacerse cargo del centro. El edificio, además, recibió en 2019 el Premio al Mejor Proyecto Arquitectónico, concedido por el Ministerio de Construcción y Desarrollo Urbano de Mongolia.
También el presidente del país, Ukhnaa Khurelsukh, entonces primer ministro, manifestó su alegría cuando vio que CREC4 había terminado la primera autopista de Mongolia en 2017. Con sus seis carriles y 32,2 kilómetros, conduce al nuevo aeropuerto de la capital, Ulán Bator.