Los buques metaneros son barcos de gran tamaño especialmente diseñados para transportar gas natural licuado a menos de 163 grados bajo cero. Aunque su papel resulta fundamental para garantizar el suministro, construirlos es una de las tareas más complicadas que existen en la industria naval.
En la carrera por lograr la neutralidad de carbono, la demanda de gas natural ha experimentado una fuerte demanda a escala mundial. Por ello, un país con capacidad para construir metaneros propios puede presumir de tener su seguridad energética garantizada.
Si bien este sector específico solía estar dominado por los astilleros japoneses y surcoreanos, China está ganando terreno en este campo, todo un hito en la ingeniería naval del país.
El astillero Hudong-Zhonghua, una subsidiaria de la Corporación Estatal de Construcción Naval de China con sede en Shanghai, fue el impulsor del cambio. En 1998, la compañía lanzó un proyecto de transportador de gas natural licuado y, en 2008, terminó el primer barco metanero construido por China, llamado Dapeng Sun. En la actualidad, este astillero ha entregado ya más de 40 buques gaseros y domina la técnica de construcción más sofisticada y avanzada del mundo.
El año 2022 marca un antes y un después para la industria de busques gaseros en China, ya que el país recibió más del 30% de los nuevos pedidos de barcos de este tipo que se hicieron en el mundo.
A pesar de que Corea del Sur lidera todavía el sector, el rápido desarrollo de los astilleros nacionales postula a China como una importante competidora. Se trata de un logro conseguido tras muchos años de esfuerzo que augura tiempos prósperos para la construcción naval del país.
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